Antes de hablar sobre todo lo que el Propóleo y la Echinacea pueden hacer por ti, quiero contarte lo que han hecho por mi,
Esta es mi experiencia personal con Propóleo y echinacea:
LO QUE EL PROPÓLEO Y LA ECHINACEA HAN HECHO POR MÍ
Cuando todavía no había a empezado seriamente a interesarme por el mundo de la salud natural, llegaron el Propóleo y la Echinacea a mi vida. Como suele suceder, llegaron por recomendación terapéutica, yo tenía los niños pequeños y algo bajos de defensas así que dentro de la consulta con un terapeuta natural aparecieron estos dos remedios en forma de extractos y empezamos a tomarlos.
Jamás había tomado antes extractos y desconocía cualquier otra forma de tomar plantas fuera de las infusiones. Los dos niños no tuvieron ningún problema con la Echinacea ni con el Própoleo. Yo, como adulta totalmente intoxicada por la mala alimentación, aunque en fase de cambio en esa época, todo hay que decirlo, fui incapaz de tomarme el Propóleo.
Incapaz. De hecho me asombraba que alguien pudiera tomarlo y ni siquiera comprendía como mis hijos aceptaban esas gotitas que les ponía en el agua. Recuerdo todavía un sabor mineral imposible y muy potente, algo que más bien parecía una poción infernal que un remedio … El caso es que ambos extractos surtían efecto, y los catarros de ese año fueron menos y más cortos. Estuvieron tomándolo un tiempo y luego ya sólo recurríamos a ellos cuando daban algún estornudo o alguna tos.
Una vez superada la “desintoxicación” metabólica por la mala alimentación, como he dicho antes, habiendo perdido algunos kilos, recuperado el humor y las actividades físicas, volví a enfentarme al Propóleo, sólo para ver si ahora era capaz de tomarlo. Y tengo que decir que sí, en ese momento SÍ, aunque mi cerebro todavía mezclaba de alguna manera el recuerdo del sabor de la primera vez.
Ahora, cuando tomo Propóleo, ni siquiera le noto ningún problema en el sabor.
En cuanto a la Echinacea, nunca me produjo rechazo, pero si indiferencia. En casa tomábamos tomillo y cada infusión me transportaba al pueblo y a los bosques, era un infusión de una planta que me llegaba. Pero la Echinacea no me llegaba, me la podía tomar sin problemas, como quien toma un medicamento, pero nada más. Con el tiempo he ido familiarizándome con ella y ahora es una planta imprescindible en el botiquín familiar
Así que a parte de la función propiamente dicha sobre la salud familiar, lo que la Equinacea y el Propóleo hicieron por mí fue abrirme a un mundo que ahora es mi mundo, el de la salud natural.
LO QUE EL PROPÓLEO Y LA ECHINACEA PUEDEN HACER POR TÍ
Como te he dicho antes, ahora tengo en el botiquín familiar a estos 2 remedios. Y acompañan también en la vida de estudiante de mi hijo mayor en los días de “exilio” urbano, lo cual no es dato menor.
Vayamos pues al grano del artículo: ¿Que es lo que pueden hacer por ti el Propóleo y la Echinacea?
1-Mejorar tu respuesta inmunológica
La Echinacea es capaz de movilizar todo tu potencial inmunológico que puedas tener algo adormecido o despistado,
Lee un artículo que escribí al respecto de la Echinacea clicando aquí
Por eso es tan eficaz tomarla al principio de cualquier infección, en seguida que notamos algún síntoma de catarro o de gripe, o cuando nuestras defensas están bajas.
El Propóleo es un gran antimicrobiano y su toma permite aliviar el trabajo del sistema inmunitario
2-Eliminar virus, bacterias, y hongos
El Propóleo es un especialista en eliminar gérmenes. Esa es su función principal en la colmena y para lo que las abejas lo fabrican: para mantener la colmena y sus habitantes, libres de microbios
La Echinacea además de favorecer al sistema inmunitario para eliminar los microbios, también es antiviral .
3-Apoyar la labor de otros remedios
Tanto la combinación con Propóleo como con Echinacea parece reforzar los efectos de cualquier otro remedio antimicrobiano que tomemos, incluidos los antibióticos de síntesis. Los estudios señalan una potenciación de los efectos multiplicada, pudiendo así rebajarse la dosis del medicamento.
4-Desinflamar y cicatrizar tanto por dentro como por fuera
Ambos remedios pueden aplicarse en tópico sobre la piel y sobre las heridas o pueden tomarse por interno .
Juntos o separados, ambos cumplen perfectamente esta función. El Propóleo por su consistencia más densa facilita la aplicación tópica , y la Echinacea le otorga virtudes antinflamatorias. Ambos pueden enfrentarse a desafíos como herpes, heridas abiertas, úlceras, eccemas y quemaduras
A TENER EN CUENTA
Una minoría de personas pueden ser alérgicas al Propóleo o bien a la Echinacea. Si no sabes si es tu caso, haz una prueba previa sobre la piel , o bien toma por interno una sola gotita. Espera a ver si hay reacción.